Julio Fernández habló de un mecanismo que opera de la mano de padrinos políticos. Se reafirma en que Arévalo, además de tráfico de influencias, hizo abogacía por una carga de contrabando.

Fuertes acusaciones volvió a lanzar el director de Aduanas, Julio Fernández, en contra del senador colorado Martín Arévalo, durante su descargo, ayer, en la Comisión Anticontrabando, de la Cámara Alta.

Además de mantenerse en su denuncia sobre tráfico de influencias, y de abogar por una carga de contrabando, ahora sostiene que el parlamentario tiene vínculos con el crimen organizado.

“Aquí no hay un tango, sino una coreografía de importadores, funcionarios, despachantes, y siempre hay un padrino político”, sostuvo.