La gran vigilia del 8 de diciembre se volvió a vivir luego de dos años de restricciones debido a la pandemia del Covid-19, dando lugar en las primeras horas a la misa central de Caacupé.

Como es tradicional, la ceremonia religiosa es realizado en la explanada de la Basílica Santuario Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé, con una gran concurrencia de fieles.

El obispo local, monseñor Ricardo Valenzuela, preside la misa.