Tras la fuga de los 75 presos en la cárcel de Juan Pedro Caballero, aumentó la tensión en las principales penitenciarías de Paraguay. Revueltas y amotinamientos a la orden del día.
Los hechos de amotinamiento y fuga acontecidos en las penitenciarías a nivel nacional no resultan ser aislados. En los últimos días, se incrementó la tensión en ciudades donde se ubican las principales penitenciarías departamentales. Tras la “liberación” de los 75 presos de la penitenciaría de Pedro Juan Caballero, capital del departamento de Amambay, una seguidilla de revueltas que violentaron la seguridad en las cárceles pone a prueba la capacidad de las fuerzas de seguridad para proteger a la ciudadanía.
MISIONES
Ayer en horas de la tarde, en la Penitenciaría Regional de Misiones, se dio un enfrentamiento entre los miembros del Clan Rotela, grupo criminal paraguayo, que dejó un muerto con 50 estocadas, además de varios heridos, de acuerdo con el informe de la penitenciaría. La víctima fue identificada como Alexander Benítez Alcaraz, de 27 años. Cabe señalar que la gresca con resultado fatal se dio entre los propios miembros del mencionado clan criminal.
CIUDAD DEL ESTE
En el departamento de Alto Paraná, el director de la Penitenciaría Regional de Ciudad del Este, Gilberto Fariña, solicitó el envío de refuerzos y teme que el fenómeno de amotinamiento y fuga pueda replicarse en esta región fronteriza. El director del penal aseguró que están dialogando con los militares apostados frente a la penitenciaría. Actualmente, la Tercera División de la Caballería y la Policía Nacional cubren los perímetros de la cárcel; la cobertura no abastece y menos ahora ante la alerta de que se desaten hechos violentos.
SAN PEDRO
Así también, en el segundo departamento del país, en la penitenciaría de San Pedro del Ycuamandyyú, donde el 16 de junio pasado ocurrió una masacre entre miembros del Clan Rotela y del PCC, refuerzan la custodia 24 horas. Se tiene dispuesta una tanqueta con militares en las adyacencias del penal, desde la masacre del año pasado.
Según informó el corresponsal de La Nación, actualmente se está procediendo a realizar controles de personas y vehículos en las adyacencias de la cárcel. El director del penal asegura que no se cuenta con ningún miembro del PCC recluido en estos momentos.