El Jefe de Estado se reunió con los miembros de la Secretaría Nacional de Inteligencia y parte de su Gabinete.

Durante el encuentro, el ministro de Inteligencia, Esteban Aquino, expuso los asuntos vinculados a las amenazas globales y temas sensibles de interés nacional y regional.

El Gobierno está preocupado por el descontento social que va en aumento por las medidas de restricción impuestas en el marco de la cuarentena. El estallido que se registró el miércoles a la noche en la capital del Alto Paraná aumentó la alarma del Poder Ejecutivo, que ya venía sufriendo una feroz crítica por la corrupción imperante en varias entidades y que saltaron durante las compras de insumos para enfrentar la pandemia.

El levantamiento en el Este movilizó a las fuerzas de seguridad y se registraron enfrentamientos entre la policía y los militares con los manifestantes, quienes generaron caos con actos de vandalismos y saqueos a algunos comercios en la ciudad fronteriza.

A este escenario se suma la insatisfacción ciudadana ante la falta de respuestas para equipar los hospitales para hacer frente al coronavirus.

Ya anteriormente hubo una serie de movilizaciones ciudadanas para exigir transparencia en el uso de los USD 1.600 millones obtenidos mediante un préstamo internacional para el área de salud y la contención social mediante los programas y la asistencia estatal a los trabajadores suspendidos temporalmente.

Hay cuestionamientos ante las sospechosas compras fallidas en el Ministerio de Salud, luego de las denuncias realizadas por los medios de comunicación. Hasta el momento, la Fiscalía no avanzó con esa investigación, pese a la presión social y legislativa.

FÉRREO CONTROL. Una de las medidas anunciadas en Ciudad del Este tras el consenso entre el Ejecutivo y las autoridades locales es que habrá un férreo control para evitar que el negocio ilícito siga pretendiendo ingresar en territorio paraguayo a través del contrabando y el narcotráfico. Aumentará la dotación del personal para incrementar el monitoreo en la zona.

Entre los temas abordados durante la reunión entre Marito y el equipo de inteligencia justamente hace alusión al tema terrorismo y actividades criminales transnacionales.

Del encuentro participaron el ministro de Defensa, Bernardino Soto Estigarribia; el canciller Antonio Rivas Palacios; el general Máximo Díaz Palacios, del Consejo de Defensa; Carlos Arregui, titular de la Secretaría de Prevención contra Lavado de Dinero; y el viceministro del Interior, Carlos Altemburger.

Antes de esta reunión, Abdo conversó con los altos jefes militares y recibió un reporte de la situación social, principalmente en la línea fronteriza donde se concentra la preocupación del Gobierno.

Para bajar la crispación en el Este Marito consiguió con el Congreso aprobar ayer el programa Pytyvõ 2.0, que pretende destinar USD 26 millones a ser distribuidos en dos pagos de G. 500.000 a comerciantes y familias de la zona. En capital y Central crece también la exigencia para que se desembolse otra ayuda.