El presidente Mario Abdo Benítez anunció anoche que por los focos de contagio en Foz de Iguazú se restringirá el paso no solo a extranjeros, sino también a connacionales.

El Gobierno anunció anoche, poco antes del horario de restricción de la circulación, que debido al tránsito masivo de paraguayos al lado brasileño en el Puente de la Amistad, tomó la decisión de cerrar el paso de personas, no así de las mercaderías y bienes desde las 0:00 de hoy.

La situación en otras zonas de frontera con el Brasil, como Pedro Juan Caballero y Saltos del Guairá, se definirá hoy aunque, debido a la dificultad de cerrar totalmente la capital de Amambay, se buscaría la forma de centrar los controles en Chirihuelo.

Sin decirlo abiertamente, el Gobierno paraguayo tomó esta medida debido a la falta de reacción adecuada del Brasil a raíz de la expansión del coronavirus.

Abdo Benítez aclaró que el paso de camiones tendrá un estricto control a los choferes y todas las medidas que exige la actual pandemia, y sigue de manera a no parar el comercio y movimiento económico.

Además, las personas que ingresaron desde las 0:00 deberán obligatoriamente someterse a una cuarentena.

“Vamos a cerrar desde esta noche a las cero horas el tránsito. Ya estaba cerrado para los extranjeros que ingresen al Paraguay en toda nuestra frontera. Hemos visto un gran volumen de paraguayos que van y vienen, y pueden ser contagiados estando en Foz de Iguazú, donde ya se ha detectado la presencia del virus (Covid-19)”, indicó Abdo al tiempo de disculparse con comerciantes que viven de eso.

Señaló que serán tenidas en cuenta las excepciones, según el caso, como por ejemplo: tratamientos médicos necesarios u otros, y que los paraguayos que retornaron después de las 0:00 horas de hoy estarán sujetos a cuarentena obligatoria.

Acatamiento

El mandatario se mostró satisfecho y agradecido con el acatamiento de las medidas restrictivas y el cierre de fronteras establecido desde el lunes, y pidió paciencia para poder superar la crisis.

Desde el anuncio del bloqueo parcial fronterizo, con el fin de evitar la propagación del coronavirus, unos 2.000 extranjeros ya no pudieron ingresar a nuestro territorio.

El ministro del Interior, Euclides Acevedo; la titular de Migraciones, María de los Ángeles Arriola, y el comandante en ejercicio de la Policía Nacional, Luis Arias se reunieron ayer bien temprano con el jefe de Estado, Mario Abdo Benítez, para evaluar las medidas y, si bien se mostraron conformes, admitieron que existen cosas por mejorar.

“El Gobierno sigue apostando a la producción, por sus trabajadores y trabajadoras. En ese sentido, vamos a ir ajustando algunos detalles y para eso hemos sido convocados. Con el comandante interino de la Policía Nacional hemos hecho el recorrido anoche por los sitios sensibles de la comunidad. Afortunadamente, los desadaptados se han reducido a minoría absoluta”, afirmó Acevedo.

El secretario de Estado felicitó a la población por su cooperación y solidaridad; no obstante, dijo que se buscará aun trabajar en algunos aspectos, los cuales se irán corrigiendo por el camino, según dijo. Expresó que muchos compatriotas se quedaron sin posibilidades de volver a sus hogares en la noche del lunes, debido a las reguladas de autobuses.

En cuanto a la aplicación de multas para aquellas personas que no acaten las disposiciones, el titular de la cartera de seguridad afirmó que, en ese sentido, serán implacables. “Estamos obligados, esto va a continuar, es un tema serio, mi responsabilidad es salvaguardar la vida de compatriotas”, expresó Acevedo.

No descartó que las medidas se extiendan un poco más de lo previsto, atendiendo la situación mundial.

“Me atrevería a decir, comparado con otras latitudes, que podría extenderse un poco más, pero al mismo tiempo estamos aprendiendo que las instituciones sigan funcionando, de tal suerte que las medidas sanitarias tomadas no afecten la producción”, indicó.