A pesar que desde Hacienda comunicaron que el presupuesto para el próximo año está ajustado, desde los diferentes ministerios están presionando para conseguir subas salariales.

El viceministro de Administración Financiera de Hacienda, Óscar Llamosas, alegó que cualquier aumento por sobre lo solicitado por el Ejecutivo pone en riesgo el financiamiento de los programas y proyectos previstos en el proyecto de Presupuesto General de la Nación para el ejercicio 2020.

La preocupación de las autoridades de la cartera fiscal también creció tras cerrarse el último lunes el periodo de audiencias en la Comisión Bicameral de Presupuesto del Congreso, ya que en dicha instancia llovieron los pedidos de incremento del gasto público (de parte de ministros, titulares de entes públicos, gobernadores y otros), que en un 90% implica subir salarios de los funcionarios.

El panorama podría empeorar más aún de otorgarse los nuevos aumentos salariales reclamados, porque pondrá en riesgo el normal funcionamiento y la operatividad de las entidades del Estado, reiteró Llamosas.

Los salarios en la administración central se llevan hoy el 74% de los ingresos tributarios (de cada G. 100 recaudados G. 74 van a salarios), y para el 2020 crece a 76%, dejando cada vez menos margen para destinar recursos genuinos para las inversiones y el gasto social. Si se incluyen más salarios, esta relación se disparará.