En escuela situada en la ciudad de Mariano Roque Alonso los niños no reciben almuerzo ni merienda.

Esa entidad educativa, además, es “como una segunda casa” para los chicos debido a que provienen de familias de escasos recursos, de acuerdo al relato de algunas madres que iban a retirar ayer a sus hijos.

DESIDIA. Mezcla de indolencia y desfase entre el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) y de la Gobernación Central.

Desde hace 15 años la escuela Bernardino Caballero de MRA recibía del MEC el complemento nutricional. Sus rubros y su habilitación provienen de Asunción, pero está en Roque Alonso, a metros de capital. Y como la Ley 5210/14 establece que al Ministerio le corresponde las instituciones educativas de Asunción, este año quitó de su lista de beneficiarios a la citada escuela.

“La Escuela Básica Nº 1008 Gral. Bernardino Caballero se encuentra en el distrito de Mariano Roque Alonso, y de acuerdo a la respuesta tanto de Asesoría Jurídica de la Dirección de Contrataciones y de la Dirección Administrativa, no puede recibir el beneficio por parte del MEC porque es responsabilidad de la Gobernación de Central o la Municipalidad de Roque Alonso”, respondió Killy Moleda, directora de Bienestar Estudiantil del MEC.

Solicitaron –dijo– a Central la provisión de los servicios para la escuela, “pero respondieron que no pueden porque ya tienen contratos siendo ejecutados y no cuentan en este momento con presupuesto”.

Fátima Estigarribia del departamento de Gestión Administrativa de la Gobernación, explicó que la licitación que tienen del complemento nutricional es plurianual, 2019-2020. Por lo que incluirle en el presupuesto “es imposible”. “La escuela está en Mariano, pero nosotros ni sabíamos de la escuela por el hecho de que manejaba capital”, indicó al acotar que esa institución rendía cuentas al MEC y no a la Dirección de Educación de Central.

Lic. Fanny Núñez, directora de la escuela afectada, relató que cada año en agosto hacen la solicitud de alimentación, infraestructura y todo lo que van a necesitar en el siguiente ciclo lectivo, en el marco de la micro-planificación. Pero nadie les alertó sobre este súbito cambio. “Si nos avisaban con tiempo, íbamos a iniciar las gestiones en la Gobernación para saber el procedimiento en esa instancia porque nunca trabajé con ellos ni con la Municipalidad con el tema del alimento escolar”, apuntó.

Hablan de un “retroceso pedagógico” en la escuela
Por disposición del MEC, la Escuela Gral. Bernardino Caballero inició el año pasado la modalidad de jornada escolar extendida. Como condición, la escuela debe contar con almuerzo, infraestructura adecuada y recursos humanos suficientes. Por ello, empezaron por los dos primeros grados.
Ante la ausencia de almuerzo, los padres de la mayoría de los escolares prefiere volver al sistema de turnos, mañana y tarde, según comentó Fanny Núñez, directora de la entidad.
Esto, a su criterio, producirá un “retroceso pedagógico” a lo que tenían planificado con anterioridad. “Mucha de la gente que asiste acá está ubicada en la ribera del río Paraguay; y otros viven en asentamientos. Algunos me manifestaron que cuando no almuerzan en la escuela recurren a un comedor comunitario situado en uno de los asentamientos; por lo que optan por retirarles a sus hijos de la escuela”, refirió.