El Ministerio de Hacienda detectó anomalías por G. 450 millones que destinó el Mitic a una serie de charlas de “emprendedurismo”. Los pagos beneficiaron a un empleado de la universidad de la familia de Miguel Martin, viceministro de Tecnología.

Así,  la cartera destinó casi la totalidad del presupuesto que tiene previsto para capacitaciones. El encargado de la realización de los cursos fue Miguel Martin, quien fuera titular de la Senatic y actual viceminiestro de Tecnología. Para la entrega de dinero no hubo licitación alguna y la cartera entregó el dinero de forma directa a quienes eligieron.

El contrato para las charlas fue realizada sin licitación. La cartera entregó el dinero de forma directa a quienes eligieron.

G. 200 millones fueron entregados a la firma Astec SRL, de Sebastián Park, quien se desempeña como profesor de la Universidad Autónoma de Asunción (UAA), negocio de la familia de Miguel Martin, viceministro de Tecnologías de la Información.

En su dictamen, Hacienda reconoce que si bien los fondos no están sometidos a la ley de Contrataciones Públicas, esto no quita que la adjudicación se deba realizar “bajo los principios de economía, eficiencia, igualdad y transparencia”.

El Ministerio de Hacienda señala que se debe garantizar la calidad del servicio.

De hecho, en la contratación realizada por el Mitic no existió transparencia ni igualdad pues no hubo consulta con otra empresa que pudiera realizar las mismas capacitaciones. Tampoco existió economía, pues cada charla tuvo un precio de casi G. 5 millones por hora.