Autoridades  se reúnen hoy con líderes de bancada para tener el visto bueno a una ley de contingencia económica para hacer frente al coronavirus. Se prevé una sesión para el martes.

En el Congreso se realizará hoy, desde las 10.00, una reunión clave para el futuro del proyecto de ley de contingencia económica que pretende presentar el Gobierno Nacional en las próximas horas. El objetivo principal del planteamiento es postergar por dos meses el pago de impuestos y tener el visto bueno para un nuevo endeudamiento por USD 1.000 millones para hacer frente al coronavirus.

De este encuentro participarán las autoridades del Ministerio de Hacienda, los directivos del Legislativo y los líderes de bancada de los distintos sectores políticos.

La idea de los parlamentarios es unificar las propuestas del Ejecutivo en un solo proyecto de ley y, de acuerdo con las decisiones que surjan, se prevé una sesión extraordinaria para el próximo martes. En principio, referentes de los distintos sectores en el Senado están conformes con las medidas sanitarias y prometen acompañar otras que sean necesarias.

ESPALDARAZO. El proyecto de contingencia económica que está ultimando el Ministerio de Hacienda generó un fuerte respaldo en agentes económicos locales.

El ex ministro de Hacienda Santiago Peña, así como el ex titular del Banco Central del Paraguay (BCP), Carlos Fernández Valdovinos, coincidieron en que es fundamental utilizar todas las herramientas posibles para hacer frente a la crisis, no frenar el aparato estatal y generar incentivos al sector privado para mitigar los impactos en el mercado interno, especialmente, para preservar los empleos.

Para Peña, una emergencia de este tipo no se restringe a un ejercicio fiscal, sino que podría tener repercusiones incluso en los próximos dos o tres años, por lo que valoró el “mix” de medidas fiscales -reasignaciones, recortes a gastos superfluos y toma de deuda- que realizó el Gobierno Nacional para redireccionar los recursos a salud. Consideró que una moratoria de impuestos es una decisión acertada si lo que se piensa es alivianar la carga para los empleadores y para la gente de menores ingresos, cuidando los puestos laborales y los platos de comida en las casas.

Fernández Valdovinos resaltó que una crisis de este tipo golpeará a todos los sectores, por lo que las maniobras que se realicen para mitigar ese impacto son vitales. Rescató la rápida reacción del Equipo Económico Nacional para hacer frente a la pandemia y sugirió no caer en planteamientos populistas como algunos países de la región, que pretenden usar las reservas internacionales para financiar el gasto corriente.

EL PROYECTO. Según anunció el ministro de Hacienda, Benigno López, el Gobierno planteará al Legislativo un proyecto de ley de contingencia para suspender por dos meses el pago de impuestos. Por ende, se solicitará una autorización especial para un nuevo endeudamiento por USD 1.000 millones para que el Estado siga funcionando y asistiendo a Salud Pública en todo lo necesario.

Para esto último, se requerirá además de una excepción especial para sobrepasar el tope del déficit del 1,5% del PIB y para utilizar los préstamos en gastos corrientes.

Proyecto incluirá facultad para suspender pagos de agua y luz
El proyecto de ley de contingencia económica que presentará el Gobierno Nacional al Legislativo va tomando forma y los técnicos fiscales van ultimando los retoques para obtener el visto bueno del presidente Mario Abdo Benítez.
El viceministro de Economía y actual ministro sustituto de Hacienda, Humberto Colmán, informó que el borrador de la propuesta tenía que presentarse anoche al jefe del Equipo Económico, Benigno López, y posteriormente al titular del Ejecutivo para su remisión al Congreso de la Nación.
Adelantó que además de lo ya anunciado por el ministro López, en el planteamiento se pretende otorgar la facultad al Ejecutivo para realizar suspensiones de pagos de agua y luz a sectores determinados para alivianar la carga financiera en este periodo de cuarentena por el coronavirus.
Ejemplificó diciendo que el Ejecutivo, si están dadas las condiciones, podría posponer o fraccionar en largas cuotas el pago de los servicios básicos a industrias y comercios. Esto, prosiguió, permitirá a estas compañías seguir funcionando pese a la crisis y la falta de circulante, lo que a su vez posibilitaría el mantenimiento de los puestos de trabajo.