El calor intenso del día de ayer sumado al fuerte viento norte, reavivó el fuego en algunas zonas. También hay nuevos focos en varias zonas. Se exige que se tomen más medidas desde el Gobierno.

En el territorio chaqueño la situación se agravó:  ya están afectadas más de 312.000 hectáreas y el fuego continúa. En la víspera, en el monumento natural Chovoreca, específicamente en la estancia Tierra Buena, se realizaron intensas tareas de contención por la amenaza latente.

Otro incendio que se volvió más intenso es el que observan por segundo día los pobladores de la ribereña Bahía Negra, al otro lado del río Paraguay, en territorio Brasileño, donde el fuego se volvió a reactivar al igual que en Bolivia, amenazando con ingresar a territorio paraguayo.

Además, unos 163 focos de incendios se detectaron en el Departamento del Guairá y más de 600 focos en Caazapá, arrasando con varias hectáreas de bosques. Los bomberos señalaron que los culpables serían los vecinos.

En varios puntos se volvieron a presentar incendios de grandes proporciones, que afectaron a la Estancia Hiebert de Paso Yobái que perdió varias hectáreas de bosque y fue controlado mediante el trabajo conjunto de bomberos de Carlos Pfannl, las Fuerzas Armadas y vecinos del lugar. El origen del incendio se desconoce, pero no se descarta que haya sido a raíz de la quema de pastizales.

También hubo incendios en Villarrica, Ñumí y en el Parque Nacional de Caazapá. En este último el fuego aún no se ha controlado. El combate lo hacen bomberos forestales de San Juan Nepomuceno y Caazapá, guardaparques y miembros de las Fuerzas Armadas, con un camión cisterna e hidrantes, piletas y autobombas para reabastecer el agua. Además, los trabajos se realizan por aire.