La ANDE difundió el acuerdo suscripto con Eletrobras para la compra de potencia de Itaipú. En el mismo se perdieron todas las ventajas logradas en 2007 por Paraguay, priorizando los intereses del Brasil.

La empresa paraguaya puso a conocimiento de la ciudadanía los pormenores del arreglo al que arribaron las empresas paraguaya y brasileña. Se confirma que la ANDE contratará de 1.340 megavatios (MW) de potencia garantizada (más cara) por un total de USD 363 millones en este 2019, mientras que en el 2020 adquirirá 1.485 MW (USD 402 millones), en el 2021 traerá 1.635 MW (USD 443 millones) y en el 2022 comprará 1.810 MW (490 millones). De esta forma, aumentará su contratación un 35% en tres años.

Lo que llama la atención es que en el texto no aparezcan expresamente los beneficios que había conseguido la firma nacional en el acuerdo del 2007, fijados por la resolución 170 del Comité de Administración y Operación de los Contratos de Compra y Venta de los Servicios de Electricidad de la Itaipú (Cadop).

No se lee claramente que la ANDE tenga prioridad en la utilización de los excedentes (energía más barata), ni que pueda acceder a una parcela de la potencia ya contratada por Eletrobras, en caso de que así lo requiera. Estos dos beneficios se le habían dado a la empresa paraguaya hace 12 años. A cambio, Eletrobras consiguió que entren a operar dos turbinas más, de manera a incrementar la producción de la central, para atender sus necesidades energéticas.

Justamente, estos privilegios habían sido muy cuestionados por las autoridades brasileñas a principios de año, lo que llevó al impasse entre las compañías compradoras, y que recién se solucionó días atrás con el nuevo acuerdo.

Por su parte,

Luis Villordo, presidente de la ANDE, explicó que los beneficios están estipulados en el documento, aunque tal vez no se mencionan con las mismas palabras que en la resolución Cadop 170. Aseguró que no es verdad que Paraguay no haya conseguido beneficios, dado que la previsibilidad también le dará una ventaja para sus proyecciones.

“La vigencia de la resolución 170 está escrita en ese documento, solo que no están en esas letras, está con otras palabras. Como prueba, ya ingresó a la ANDE la factura de octubre de Itaipú, porque en el documento está que la factura se tiene que procesar tres días después de la vigencia del documento. Esa factura contempla el valor de cuánto vamos a pagar por la cesión. Como la cesión y la prioridad de los excedentes se computan de la misma manera, podemos inferir que ese documento contempla la prioridad de los excedentes y la cesión. Están plenamente vigentes, solo utilizando otras palabras”, detalló.

El titular de la estatal indicó que la negociación fue bastante complicada y que no se podían colocar taxativamente esos conceptos en el documento que se firmó con Eletrobras, considerando que eran las palabras más complicadas de los meses anteriores. Cuestionó que ex autoridades de la ANDE, como Pedro Ferreira y Fabián Cáceres, estén objetando los alcances del arreglo, ya que son los únicos que no encuentran las ventajas para la estatal.

Miembros paraguayos del Parlasur remitieron un pedido de informe a la ANDE para conocer más detalles acerca del arreglo con Eletrobras, pues temen que el convenio termine siendo igual de perjudicial que el acta bilateral de mayo, que firmaron las cancillerías de Paraguay y Brasil.
Ricardo Canese, presidente de la Comisión de Hidroeléctricas del organismo, explicó que se decidió hacer la solicitud para cuantificar los sobrecostos que implican este nuevo acuerdo de contratación de energía.
Para Canese, el documento oficializado es “extremadamente grave”, pues se comprometió la adquisición de electricidad por tres años, de manera anticipada, cuando que ningún gobierno anterior aceptó estos términos.