El presidente del PLRA, que está procesado por varios delitos, recurrió a la Corte Suprema para que anulen los fallos en su contra.

Asesorado y defendido por el abogado Guillermo Duarte Cacavelos, Efraín Alegre recurrió a la Corte Suprema de Justica para que se le anulen los fallos por los cuales se le impusieron medidas alternativas a la prisión en este proceso.

A fines de agosto de este año la jueza Cynthia Lovera dispuso que para que el presidente del PLLRA no vaya preso debe cumplir las siguientes medidas:

–  prohibición de salida del país,

– prohibición de cambiar de domicilio,

– comparecencia mensual ante el juzgado

– fianza de G. 150 millones

De no cumplir con estas medidas se autoriza el pedido de prisión preventiva.

Pero, la defensa de Alegre presentó una nueva chicana. Duarte Cacavelos apeló la resolución, aunque la misma fue confirmada el pasado 11 de septiembre por la Cámara de Apelación integrada por Arnuldo Arias, Emi­liano Rolón y Óscar Rodríguez Keneddy

Ahora, Alegre y D. Cacavelos van a la Corte Suprema, presentado una acción de inconstitucionalidad.

Con esto, el dirigente liberal exige un trato especial durante su proceso. Y, aunque no esté cumpliendo con las medidas que le otorgaron el 25 de agosto, sigue libre.

Vale la pena destacar que el mismo día que se conoció las medidas alternativas, Alegre terminó la audiencia a los gritos amenazando que no iba a cumplir nada.

 

IMPUTACIÓN

La Fiscalía imputó al presidente del  Partido Liberal por presentar factura falsa de rendición de sus gastos ante la Justicia Electora

El fiscal Édgar Sánchez imputó a  Alegre y a los apoderados esteños Pascual Benítez y Luis Moriz por los delitos de producción de documentos no auténticos y producción mediata y uso de documentos públicos de contenido falso.

Debido a la investigación, el empresario Silvio Concepción Martínez, dueño de una estación proveedora de combustible, se enteró  de que se falsificó una factura suya dada al Partido Liberal en el 2018. El documento real era por la compra de combustible por valor de 100.000 guaraníes, pero se hizo figurar que se cargó por 98 millones de guaraníes.