El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, habló ayer finalmente de los resultados electorales del domingo pasado, que lo dejaron como el gran perdedor de los comicios. Si bien admitió la derrota, el mandatario trató de desmarcarse del fracaso de su sector, que tuvo una pulseada especial con el cartismo en Asunción, donde terminó imponiéndose Óscar Nenecho Rodríguez como candidato colorado a intendente.

Abdo eludió así la responsabilidad electoral y dijo que su prioridad es seguir trabajando en lo que hoy le interesa a la ciudadanía, que es tener oxígeno e insumos en los hospitales, y tratar de conseguir la mayor cantidad de vacunas de manera más rápida, situación que tampoco es una realidad.

Evaluación. “De repente ya no entiendo, porque muchas veces critican porque me involucro en política y ahora critican porque no me involucré en política pero péa péichante voi (eso es así nomás luego). Pero realmente yo no me involucré mucho en este proceso electoral, sí tuve mis candidatos y mis amigos a quienes articulé y apoyé. Hacer una evaluación del proceso electoral tenemos que hacerlo, creo que lleva un tiempo”, señaló el presidente.

Afirmó que sus amigos tuvieron en general unas buenas elecciones, aunque es cierto que en capital no se pudo unir a toda la dirigencia. “Sin embargo en tres meses sacamos un candidato, hizo 40.000 votos, estamos satisfechos nosotros con la campaña de capital. Sí perdimos, en política se gana y se pierde. Ustedes saben, yo no niego mi candidato fue mi ex colaborador Dani Centurión y yo estoy muy orgulloso de nuestra propuesta en Asunción y de lo que se pudo hacer en tres meses de campaña”, expresó Marito.

Insistió que seguirá priorizando la gestión de Gobierno. “Siempre cuestioné a los presidentes que asumen una jefatura de campaña (…). Voy acompañar a mi partido pero no voy a priorizar el electoralismo”, indicó.